En torno a lo imposible de gobernar. O, ¿cómo concluir, de la buena manera, un cartel?
Segunda Inflexión: Lo imposible de educar INTRODUCCIÓN A la caída de la Ley y el hundimiento del Otro en el mundo contemporáneo, se sufre de un vertiginoso ascenso del contrato, la fraternidad y la evaluación. Y si, en el régimen de la Ley, la ley y su silencio permitían: todo lo que no estuviera expresamente prohibido; en el contrato nadie sabe nunca a qué atenerse entre lo que se dice y lo que no se dice. Entonces, la evaluación y la carga administrativa no paran de crecer, siempre teniéndose que rellenar una casilla más… En este universo abstracto de saberes y reglas, se demanda al sujeto embrollado y sobrecargado: “la adaptación flexible a lo eventual” (Miller, 2013). La multiplicación de normativas y protocolos, la "cultura de la demanda" y el capricho sin ley, han llegado al llamado "Mundo Educativo". Así, ante la reducción de cualquier cuestión a la lógica cientificista de "problema-solución", en un empuje a querer olvidar e